Cada vez se sabe más sobre la tecnología de los módulos solares fotovoltaicos. Sabemos más sobre la capacidad de la batería, el inversor de corriente, existen cada vez más subvenciones… Pero, a veces, hay cosas más “simples” a las que debemos prestar atención, como por ejemplo: ¿hacia dónde debo orientar los paneles? ¿Dónde puedo colocarlos si no tengo mucho tejado? En este post, desde Arcess vamos a tratar de responder estas preguntas, y así daros un poco de luz sobre este tema si os estáis planteando instalar módulos solares en vuestra vivienda. ¡Hablemos de la orientación de las placas solares!
Llevamos ya 30 años viendo evolucionar las instalaciones solares. Gracias al uso del silicio como material, hay mayor potencia en cada célula fotovoltaica, lo que nos permite generar más energía sin necesitar más superficie. Normalmente, lo habitual es que veamos las placas solares en los tejados de las viviendas, bloques o empresas. Esto es así porque, habitualmente, esta superficie no tiene ninguna otra función y nos permite encontrar el equilibrio perfecto entre la orientación y la inclinación.
Pero esto no significa que sea la única superficie válida. Hay una amplia variedad de opciones válidas, como por ejemplo, el propio suelo. ¿Cómo? Instalando unas bases de hormigón y estructuras metálicas que sujeten los paneles. De hecho, en función del tamaño de la instalación, puedes aprovechar el hueco resultante como aparcamiento para el coche, o como trastero. Esta instalación de estructura metálica se puede hacer igualmente en el tejado, terraza o jardín, para poder colocar los módulos fotovoltaicos de la forma óptima.
Como cuando estamos buscando casa y queremos saber hacia dónde está orientada para tener la mayor cantidad de horas de luz, aquí funciona exactamente igual. Teniendo en cuenta el recorrido del sol cada día, y a no ser que haya un obstáculo en medio que te perjudique, lo ideal es orientar los paneles en dirección al sur, de modo que reciban la mayor cantidad de luz.
¿Y la inclinación? ¡También es importante! Y más de lo que podríamos pensar. Sobre todo porque, a no ser que tengas acceso habitual a los paneles o tengas un sistema motorizado, van a permanecer siempre con la misma inclinación. Igual que con la orientación, la mejor manera de conocer la situación óptima es tomar como referencia la posición del sol a lo largo del tiempo. Por ello, la mejor inclinación es de 30 grados durante el año. Técnicamente, en verano deberían estar algo más bajas, y en invierno más altas, pero si queremos hacer la media, 30º sería lo ideal.
Si tienes acceso a ellas y quieres variar la inclinación según la época del año, podrás sacarle todo el partido a tus paneles solares y optimizar cada rayo de luz.
Como veis, resolver cuestiones como la inclinación o la orientación de las placas solares no es algo baladí, sino que nos va a ayudar a amortizar más rápidamente la instalación, y que el ahorro sea mayor. No obstante, si este artículo os ha dejado alguna duda, no os preocupéis, nuestros profesionales son conscientes de toda esta información, y atenderán encantados a vuestras consultas en el momento de la instalación.
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